El cerebro no busca afanosamente la verdad, sino la supervivencia
“Nadie puede apartarse de la verdad sin dañarse a sí mismo.” Lope de Vega
“Engullimos de un sorbo la mentira que nos adula y bebemos gota a gota la verdad que nos amarga.” Denis Diderot.
“Y es que en este mundo traidor, no hay verdad ni mentira: todo es según el cristal con que se mira” Ramón de Campoamor.
¿Estamos los españoles y los seres humanos en general predispuestos genéticamente al sectarismo y dogmatismo?
La naturaleza nos ha dado la capacidad de podernos adaptar al medio ambiente y ser firmes en nuestras creencias y convicciones.
Pero a la vez de ser flexibles y dispuestos al cambio si es necesario, cual juncos al viento que se doblan, pero no se caen.
Un artículo publicado por el Instituto juan de Mariana titulado:pensador piensa, demostrador demuestra: la adicción a las ideologías.
Muchas personas son adictas a sus ideologías y creencias
El autor comenta que los seres humanos tenemos la capacidad de crear narrativas, algo común en todas las lenguas y culturas.
Estas historias se pueden parcializar, desnaturalizar y adaptarla a los intereses propios.
Al legislar se produce una discriminación, desnaturalización, patrones disfuncionales.
Así se crean unos interese que perjudican a ciertas personas.
Se puede caer en totalitarismos ideológicos envueltos en moral.
Esta mora puede prioriza intereses en beneficio propio.
Hay que usar el sentido común y alejarse de de las ideologías.
La mayoría ven el mundo de una forma segada, sectaria, intransigente y dogmática.
Los sentimientos hay que usarlos como guía, también el sentido común.
Si no caemos en una cárcel mental en la que creemos lo que nos interesa en vez de la realidad.
Nuestro cerebro tiene capacidad de adaptación.
Dadas unas circunstancias favorables el organismo humano es adaptable tiende a tener unas creencias constantes, pero también flexibles.
El organismo humano se puede poner a la defensiva .
Unna vez que esto sucede es difícil deshacer esta tendencia, estas creencias, hábitos.
La verdad es una actitud, es una motivación, una búsqueda personal y opcional.
Con el desarrollo de la ciencia es difícil mantener ciertas creencias en el ámbito de la salud, la economía, historia, psicología etc.
La verdad es lo único que nos puede hacer libres. De otra manera podemos estar en una cárcel.
De otra manera estamos encadenados a nuestras creencias.
Éstas actúan como opios en el cerebro ya que producen endorfinas.
Con mi ayuda podrás recuperar tu alegría de vivir y ser realmente libre
Puedes llamarme son compromiso al 601 20 83 68 o contactarme